Female NovelCapítulo 263
-¡Pum!
-¡Púm-!
El campo de tiro resonaba de vez en cuando con disparos, ensordecedores como el latido del corazón
de Nerea.
Ella veía cómo los otros cinco miembros del equipo ya habían guardado sus armas, asustada, golpeaba repetidamente la mano de Roman, Roman, Roman, iya me puedes soltar!
-No quiero.- El hombre que hace un momento prometía solemnemente, ahora sin previo aviso, se retractaba, -Nea, ¿te gustaría…?
Nerea, enfadada, le pisaba los zapatos sin parar, -¡No quiero, no quiero! ¡Qué fresco eres, ni se te
ocurra!
-Eh-
Roman soltó una risa sofocada, y en el momento en que los otros cinco participantes se voltearon, la soltó, -Solo quería saber si tenías sed.
Nerea negó con la cabeza, no tenía sed, ni un poco, el único sediento era él.
-Está bien.
Roman se dio la vuelta, caminando hacia fuera del campo.
Nerea lo miraba irse, frunciendo el ceño confundida. ¿Esa dirección llevaba a la zona de descanso del Comandante? ¿Estaba grabando un programa y él iba para allá… espera!
¿Lo que acababa de decir sobre terminar el tiro no serja…?!
El rostro de Nerea se enrojeció en un instante.
Ese hombre, con la cabeza llena de tonterías, era demasiado, atreviéndose a hacerle eso delante de
tanta gente… ¡y diciéndole a Jared que se calmara, como si él pudiera estarlo más!
-¡Presidente!
En la sala de descanso, Javier se levantó inmediatamente al ver a Roman, -La llamada transatlántica de Louise, te espera a más tardar pasado mañana en la hacienda Lafe para firmar el contrato en
persona.
-Mmm.
-Hay otra cosa, Joseph dice que hay nuevas pistas sobre el caso de la audición explosiva de la señorita Nerea en el casting de Llega La Reina. Una vez que confirme las investigaciones, prácticamente se puede concluir el caso y pasarlo a la policía. Además, en el proceso de seguir al sospechoso, hizo un descubrimiento inesperado.
Roman levantó la vista, -¿Qué descubrimiento?
-No sé.- Javier, -Se lo guardó todo misterioso, solo dijo que era de gran importancia, que quería tener todas las pruebas listas para reportárselo personalmente mañana. Parecía más bien… como si no quisiera que le robaran el mérito.
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Capítulo 263
-Que venga después del programa de mañana.
-¡Entendido!
-¡Fin del ejercicio de tiro, esperando los resultados!
Isabella, Débora, Viena y Jared bajaron del puesto de tiro con el ceño fruncido, solo Ramiro, todo sonrisas hacia Nerea, dijo-¡Nerea, logré 27 puntos! Aunque no tan bueno como tú, jes mi mejor desempeño!
Débora soltó un bufido, -Por pozo y nada, aunque solo te faltaron tres puntos, ella es la primera, y tú solo el segundo, ¿de qué alardeas?
Ramiro bajó la cabeza, avergonzado. Nerea, viéndola incapaz de dejar de provocar, rodó los ojos y le corrigió, -Por poco y nada, mejor lee un poco, ¿no?
Al tocar su punto débil, Débora casi echaba humo por la nariz, -Tú…
El Comandante Jamil anunció: -Ahora, los resultados: Ramiro, 9, 9, 9, un total de 27 puntos; Jared, 3, 3, 2, un total de 8 puntos; Isabella, 2.5, 4, 3.5, diez puntos en total; Débora, 3, 6, 3, doce puntos en total; Viena, 2, 2, 3, siete puntos en total; Nerea, 10…
Cuando el Comandante Jamil llegó a Nerea, se detuvo, y luego confirmó, -¡Diez puntos en total!
Todos los compañeros de equipo y los espectadores: ¿Qué?
Ante su confusión, el Comandante Jamil explicó, -Según las reglas, se cuenta por impactos en el blanco. En el de Nerea, solo hay un impacto, así que solo podemos contar una ronda de puntos.
-¡Jajajaja!
El aire se quedó en silencio por un segundo, luego estalló en carcajadas, con Débora riendo más fuerte
-¿Será esto lo que llaman de la alegría al llanto?
-¡Es el clásico orgullo antes de la caída!
-¿Entonces Ramiro se convierte en el campeón, y Nerea, como nosotros, solo cuenta 1 punto?
-Nerea, lo siento, aunque gané el primer lugar, tú eres la verdadera número uno en mi corazón.
Nerea: ¿Qué?- ¿Acaso este es el precio de presumir?
-Director, las reglas son rígidas, pero las personas son flexibles. ¿No podemos hacer una excepción?
El director sacudió la cabeza. Lo que ese programa de variedades buscaba no era justicia, sino entretenimiento. Viendo cómo la audiencia se reía a carcajadas en los comentarios, parecía que el efecto deseado se había logrado.
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